El Dr. Rigoberto
Aranís Oyarzún, de quien no poseemos mayor información, era objeto de la
siguiente inserción en 1895:
Con motivo de una grave enfermedad que contraje en
Lennox estuve postrado largos meses en cama casi sin esperanza alguna de poder
recuperar mi salud. La ciencia médica era impotente para cortar el mal ó á lo
ménos minorarlo; por fin uno de mis compatriotas me refirió la casi milagrosa
curacion efectuada por el Dr. en medicina, Sr. Rigoberto Aranis y Oyarzun, en
la persona del Teniente de marina Sr. Guerrero; mas por curiosidad que por fé,
rogué al Dr. Aranis me diese algunos medicamentos. Cosa rara, S.S.E.E., desde
que me puse en manos del Dr. Aranis, principió una reaccion mui favorable en mi
salud á tal punto que hoi me siento del todo bien. Seria un acto de ingratitud
si ántes de partir de esta hospitalaria tierra no enviase desde estas columnas
mis mas profundos agradecimientos al que me devolvió la salud.
La reputacion que ha alcanzado el Dr. Aranis entre
nosotros es merecida y tanto mas digna de encomio cuanto que no es debido á la
habilidad que otros tienen para formarse una reputacion postiza, sino á la
evidencia palpable de un talento como ha dado ya pruebas que una sola de ellas
es suficiente y bastante para ocupar el puesto que su talento le ha discernido.
Si bien la
redacción del último párrafo es algo confusa, ¡hay que ver que estaba
agradecido don Lorenzo!
En
1909 se habían agregado los doctores Ismael López, Germán Vogel, Juan Pais Gregurina
y Mateo Bencur. Estos dos últimos, croata y eslovaco respectivamente, habían
sido formados en la prestigiosa Escuela de Medicina de Viena[2]. En los años de
la década de 1910 se fueron agregando Oscar Munizaga Ossandón, Domingo López,
Abraham Dodds y Francisco Ferrada, todos en Punta Arenas[3]. En Porvenir servían los doctores Joliffe y N.
Millorin y en Puerto Natales Ildefonso Díaz y Pereyro y Daniel Acuña.
Primer Hospital de Caridad |
Ismael
López fue el director del primer Hospital de Caridad, situado en la esquina de
Ecuatoriana -actual Ignacio Carrera Pinto- y O’Higgins. Continuó en el cargo en
el nuevo Hospital de Caridad, completando
dieciocho años, hasta 1922[4]. Fue también médico
inspector de las casas de tolerancia[5].
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